lunes, 7 de enero de 2013

Información sacada del foro hamstersenanos.

De la tienda a casa

En la mayoría de los casos, compramos a nuestro hámster en una tienda, donde también adquirimos su jaula, comida y otras serie de cosas. En la tienda nos dan una breve información sobre el cuidado del hámster y sus necesidades. Y a eso nos ceñimos. ¿Cuál es el problema entonces? Pues sencillo, que lo hemos hecho todo mal (tranquilo, nos ha pasado a casi todos).

En primer lugar no deberíamos haber comprado al hámster. Deberíamos haberlo adoptado, bien a alguna asociación protectora de animales, bien a algún aficionado particular que los críe. Las condiciones a las que se ven sometidas los animales para ser vendidos en las tiendas son terriblemente crueles. 
Además, los hámsters que se venden en las tiendas suelen ser excesivamente jóvenes (han sido destetados prematuramente y no han completado su ciclo de crecimiento junto a su madre) y pueden tener problemas de consanguinidad, lo que tiene como consecuencias enfermedades congénitas y una esperanza de vida muy inferior a la normal en ellos. Esto se debe a que nos suelen atraer animales más pequeñitos y con más aspecto de bebés. 


En segundo lugar, deberíamos habernos informado antes de comprar. Piensa que una tienda es un negocio, no una asociación protectora. Su único objetivo es conseguir los mayores beneficios posibles. Si una tienda se preocupara por los animales no los vendería, porque conoce de sobra las condiciones en las que viven y son criados por criadores profesionales. Y no son condiciones de las que se podría sentir orgulloso un amante de los animales precisamente...
Así, comprar un hámster no difiere mucho de comprar un coche o una videoconsola. El vendedor intentará que hagamos el mayor gasto posible, lo cual en muchas ocasiones es contraproducente para la salud del hámster.


Un hámster, una jaula

Seguramente tengas un solo hámster, pero es posible que compraras dos (para que no se sintiera solo, por ejemplo). Bien, los hámsters son animales terriblemente territoriales y no permiten la existencia de otro hámster en su espacio, una vez que ambos alcancen la madurez sexual (en torno al mes o dos meses de vida). Esto afecta a todas las razas de hámsters. Así, si tienes dos hámsters tienes que separarlos en dos jaulas inmediatamente, sino puede que una mañana veas la jaula llena de sangre...

Algunas personas son reacias a esta separación, bien porque piensan que el hámster se sentirá sólo (no es cierto, los hámsters son animales solitarios, no son perros), bien porque en la tienda les han dicho que no hay peligro si están juntos desde crías (esto es totalmente falso, da igual que los hámsters se hayan criado juntos o no. De hecho las tiendas lo saben, sólo esperan a que empiecen las peleas para que vayas a comprarles otra jaula).

Por último, cabe destacar que si tus hámsters son de diferente sexo, es posible que no haya peleas. En su lugar habrá camadas de hasta 9 crías cada 18 días. Esto es una irresponsabilidad puesto que es difícil buscar hogar para esos hámsters y seguramente no te los puedas quedar. Además la hembra puede fallecer en el parto o enfermar por muchos partos seguidos y morir.


El comportamiento de nuestra pequeña mascota

Como solemos decir nosotros, cada hámster es un mundo. Pero dentro de ello, hay determinados comportamientos y actitudes que son comunes entre ellos. 

Lo más importante que tienes que saber es que los hámsters son animales de hábitos nocturnos. Descansan por el día y por la noche se produce su momento de mayor actividad. Su instinto les lleva a actuar así para huir de los depredadores. Debemos, pues, respetar este comportamiento. 
El hámster por el día deberá permanecer en un sitio en el que pueda descansar sin ruidos molestos, y por la noche en otro en el que pueda hacer ruido sin molestar a nadie. Esto no quiere decir que no vayamos a ver a nuestra mascota, los hámsters suelen tener pequeños periodos de actividad diurnos en los que podemos aprovechar para jugar con ellos. Cuidado al cogerlos y sacarlos de la jaula. Los hámsters tienen mala vista y no calculan las alturas, con lo que pueden saltar de nuestra mano al suelo por miedo y resultar lastimados o incluso morir.

Otras cosas que tienes que saber sobre tu hámster es que no debes bañarlo (son muy limpios, no nos necesitan para su aseo), tienden a almacenar la comida en su nido (no te sorprendas si la comida desaparece a gran velocidad del comedero), la limpieza de la jaula los estresa muchísimo (pierden todos sus olores, es como si los pusieras en una casa distinta a la que conocen) por lo que ésta tiene que realizarse sólo cuando sea imprescindible (pueden que te hayan dicho que cada semana, eso es una locura), no son animales agresivos (salvo casos puntuales como los Campbell de color negro) aunque pueden dar algún pequeño mordisco, etc. 


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